Meditación
Cuando Israel estaba por cruzar el Jordán para llegar a la tierra prometida, en poco tiempo se enfrentaría a ejércitos grandes y fuertes, los mismos que hicieron temblar al pueblo liderado por Moisés cuarenta años atrás. Antes de que iniciara la conquista, Dios le recordó a Josué (quien había quedado a cargo del pueblo tras la muerte de Moisés), que sin importar lo que vivieran, él debía esforzarse y ser valiente para obedecer puntualmente a Dios.
En su Palabra, Dios afirma claramente que necesitamos ser valientes para salir adelante en nuestra vida y obtener sus promesas. La valentía es la determinación para enfrentarnos a situaciones arriesgadas o difíciles. Esto implica que podría haber temor, pero no permitimos que nos paralice, sino que lo enfrentamos dando nuestro mayor esfuerzo, con el fin de obedecer a nuestro Dios.
Dios le hizo la promesa a Josué de que si se esforzaba y era valiente para obedecer su Palabra, entonces él prosperaría en todo lo que emprendiera. Si bien esta promera era para Josué, nos permite aprender acerca del corazón de Dios. La clave es que en medio de los problemas y adversidades haremos todo lo que Dios nos mande con valentía, pidiéndole que nos fortalezca, y así sabremos que Él está con nosotros.
Para Meditar
¿Existen algunos problemas tan difíciles de enfrentar que huyo o decido pecar, en lugar de mantenerme firme en obedecer a Dios?
La Palabra de Dios
Solamente esfuérzate y sé muy valiente, para cuidar de hacer conforme a toda la ley que mi siervo Moisés te mandó; no te apartes de ella ni a diestra ni a siniestra, para que seas prosperado en todas las cosas que emprendas. Josué 1:7
Gúardate, no te vuelvas a la iniquidad; Pues ésta escogiste más bien que la afliccion. Job 36:21