Meditación
¿Eres uno de los miles de creyentes en el mundo que constantemente tienen problemas, angustias, circunstancias difíciles y dolorosas? Entonces Dios quiere utilizar estas circunstancias para bendecirnos enormemente. Pidámosle que nos guíe para ver claramente.
Dios nos quiere llevar a confiar plenamente en Él, aún a pesar de las vivencias (en apariencia) negativas. Si lo hacemos, en el proceso nuestro viejo hombre va muriendo poco a poco, pues éste estaba acostumbrado a que le diéramos lo que quería (el pecado) cada vez que sentíamos ganas. Pero ahora lo estamos dejando morir de hambre, pues ni la mayor presión a la que somos sometidos logra que decidamos pecar. Entonces se va formando un carácter más fuerte en nosotros.
Al decidir esperar con paciencia en Cristo, el nuevo hombre se va fortaleciendo más y más, y el fruto de Dios se empieza a manifestar en nuestra vida. De nuevo, es clave negarnos a nosotros mismos, y seguir a Jesucristo continuamente (obedeciéndole). Si hemos pecado, no nos desanimemos, sino pidamosle perdón a Dios y confiemos en su misericordia, con un corazón sincero que desea vivir en entrega a Dios.
Al morir a nosotros mismos (al pecado), las aparentes desgracias y situaciones desgarradoras que vivimos, se podrían convertir con el paso del tiempo (incluso meses y años) en bendiciones disfrazadas. Pues nos ayudarán a tener un carácter más fuerte, y el fruto de Dios se podrá hacer manifiesto en nuestra vida.
Para Meditar
¿Por qué es que los problemas podrían ser bendiciones disfrazadas en mi vida?
La Palabra de Dios
De cierto, de cierto os digo, que si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda solo; pero si muere, lleva mucho fruto. Juan 12:24
Llevando en el cuerpo siempre por todas partes la muerte de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestros cuerpos. Porque nosotros que vivimos, siempre estamos entregados a muerte por causa de Jesús, para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestra carne mortal. 2 Corintios 4:10-11