Meditación
La Palabra de Dios menciona al necio 71 veces, tan solo en Proverbios. Se le presenta como alguien apartado de razón, orgulloso, de malos caminos. El diccionario de la Real Academia Española lo define como: "Ignorante", "imprudente", "terco y porfiado en lo que dice o hace".
Parece difícil de superar (en el sentido negativo). No obstante, las la Biblia señala a tres personajes aún peores que un necio:
- El hombre sabio en su propia opinión: Un individuo que cree saber mucho, por lo cual está lleno de orgullo. No admite que lo corrijan. Le cuesta pedir perdón por sus errores. Piensa que la culpa de los errores es de otros. No le gusta pedir consejos.
- El hombre perezoso: Esta persona no trabaja ni se esfuerza. Lejos de laborar, voluntariamente depende económicamente de otras personas y el gobierno (dichas ayudas pueden ser necesarias, pero este personaje las busca por pereza). Es tan necio que ni aún el hambre o la necesidad le hacen esforzarse o cambiar de opinión
- El hombre ligero en sus palabras: Un sujeto que habla sin antes pensar. Tiene tanta arrogancia en su corazón, que no considera necesario evaluar o medir lo que va a decir, simplemente lo hace. Hiere a los demás, revela secretos por el chisme, destruye con sus palabras.
Pidamos a Dios que nos dé la gracia para vivir sin las características de dichos individuos. Por el contrario, que Él nos haga estar conscientes de quiénes somos (humildes en nuestra propia opinión), trabajando con diligencia y meditando antes de hablar.
Para Meditar
¿Hemos vivido como alguno de estos tres hombres? Pidamos a Dios que nos haga ser hombres y mujeres sabios.
La Palabra de Dios
¿Has visto hombre sabio en su propia opinión? Más esperanza hay del necio que de él. Proverbios 26:12.
En su propia opinión el perezoso es más sabio Que siete que sepan aconsejar. Proverbios 26:16.
¿Has visto hombre ligero en sus palabras? Más esperanza hay del necio que de él. Proverbios 29:20.